Se trata de la reforma de mayor envergadura realizada en este local ribadense desde su apertura hace más de 26 años. Uno de sus propietarios Manuel Fernández relata que “hubo alguna otra reforma y varios cambios en la pintura del Ribanzo, pero esta es la más importante. Incluyó mejoras en el saneamiento, el cambio de los aseos, así como trabajos de electricidad, carpintería y pintura”. Además se realizó una reestructuración en la terraza que “ahora tiene una mayor amplitud y varias novedades, como la iluminación”. La reforma han sido coordinada por el aparejador José Mª Álvarez y por la decoradora Mariña Nistal.
El Ribanzo, es todo un clásico de Ribadeo y de su zona vieja. Ha sido y es capaz de reunir a varias generaciones entorno a sus propuestas, los vinos, los partidos de fútbol, las copas o la zona de baile.
El Ribanzo abre a las cinco de la tarde, a excepción de los días en los que partido principal de la jornada de liga comienza temprano, entonces a las cuatro el local ya está dispuesto para recibir a su fiel clientela.
Los propietarios del Ribanzo son Tito Díaz y Manuel Fernández, que explican que “estuvimos esperando el momento que nos parecía más adecuado para hacer estas obras”. De la gerencia del establecimiento se encarga Juan Carlos González (Vespi).